miércoles, 7 de diciembre de 2011

UN POEMA PARA ELLA


Poema para una fémina


Se dibujó sin brazos
Era sólo una nena
Una nena sola
Se veía desabrazada
Entregó sus brazos
Los dejó ir
Abrazados a un cuerpo
Yacen enterrados
Junto al padre muerto

¿Cómo entrelazar la vida
Si habita abrazada a la muerte?

Proyectó una ilusión
Ser abrazada por un renacido
Dibujó la magia
De una puerta abierta
Que diera paso a la resucitación
De una mujer liberada
De ese abrazo mortífero
Y morar entonces en el peligro
Del deseo femenino

¿Cómo sostener el deseo
Si se vive identificada a un muerto?

Hospedó en cavidad adecuada
Una presencia viva
Un hombre advino
Presto al lugar del principio
Intento esforzado
De alojarse en la brecha
Siempre palpitante
Del deseo del padre
Siempre insondable
En su consecuencia mortal

¿Qué brazos la salvarán
Si el amor es acarrear un órgano sacrificado?














martes, 29 de noviembre de 2011

EL VALOR DE LOS AFECTOS


Síntesis 

Se trata de situar el afecto en su valor y en su función. El afecto siempre está conectado a algo del orden significante, si como decía S. Freud lo que se reprime no es el afecto sino la representación intolerable a la que acompaña el afecto, entonces ese algo significante es del orden de lo reprimido, el afecto por tanto remite a lo que se reprimió. 

El afecto es no sólo la emoción sentida cuando nos afectamos, sino también el lugar del sujeto desde el cual se afecta de ese modo y no otro, es decir una determinada posición del sujeto respecto a lo reprimido. Y es el cuerpo quien responde afectivamente a los significantes.

El afecto es el testimonio de la represión y remite al saber inconsciente contradictorio, el S2, contradictorio significa que un término implica eso que lo contradice y anula, por eso no puede entenderse conscientemente, en la conciencia estaría solamente lo uno, o sino, lo otro, pero nunca uno y otro al mismo tiempo y en la misma relación lógica, es impensable. Es lo que pasa por ejemplo con la ambivalencia al padre, cuando estamos del lado de amar al padre por su función, está simultáneamente implicado el odio al padre  por su rivalidad. Todos los significantes de una serie asociativa provocan el mismo afecto, el amor por ejemplo, mientras que los significantes de la otra serie asociativa provocarán el mismo afecto, el odio. 
Así que cuando sobreviene un afecto inexplicable estamos seguros que nos señala la serie asociativa  significante o la parte escondida de la duplicidad del saber inconsciente. Por eso también podemos decir que el afecto da cuenta de la división del sujeto respecto a sí mismo.

El analista tiene en cuenta los afectos pero no se ocupa de ellos, el analista trabaja con las palabras del analizante, con el despliegue de su decir, con sus significantes, con su medio decir, con la escritura del saber inconsciente, que es lo mismo que decir con la literalidad de las formaciones del inconsciente, los lapsus, los sueños, las formaciones sintomáticas. 
El análisis es posible gracias a la transferencia, ella permite que cuando el analizante dice algo la parte inconsciente estará del lado del analista, quien encarnará con su presencia el significante reprimido. El analista si no hace obstáculo soportará la contradicción, sostendrá ambas caras o ambos polos del saber.

Cuando los afectos son inapropiados, exagerados o no adecuados a lo que sucede, entonces sabemos que el afecto corresponde no a la realidad objetiva, sino a lo reprimido. Es por ejemplo el caso de la fobia, donde el sujeto trata ce concretar afuera de él lo que le pasa, así en un animal, primero pasará por la angustia, después constituye el objeto fóbico, que pasa a ser un símbolo de lo traumático, pero también es una salida, pues permitirá hacer un trabajo de simbolización de algo que en principio es nada, que no tiene consistencia en sí mismo, para poder remitirlo a distintos significantes, según las escenas y fantasma en juego.

La angustia es el afecto primordial porque es correlativa a la propia existencia del sujeto, momento del trauma de separación y de división del sujeto. Nacemos por el determinismo del deseo de los padres, pero existimos porque nos separamos y por eso mismo nos angustiamos y por eso mismo deseamos. La angustia que siempre empuja hacia delante, nos hará entrar en un ciclo propio o estructural de la subjetividad, el ciclo maníaco-depresivo, en la euforia por la propia excitación de creer haber restañado la división al haber atrapado el objeto, es decir a sí mismo, en la tristeza o la pena del fracaso, de la imposibilidad de alcanzar el objeto, de caer en el agujero, de ser uno el objeto. El amor es un afecto conectado él mismo a la existencia del sujeto, rechazar y reprimir lo pulsional que es del orden de lo materno engendra culpa pero simultáneamente apego a aquel de quien uno se separa, es decir amor, amor a la madre, amor a los objetos maternos, un apego a lo materno, a su pulsionalidad que perdurará para siempre. 

21 noviembre de 2011

Texto completo en página "El valor de los afectos".


lunes, 21 de noviembre de 2011

GRUPO DE ESTUDIO Y LECTURA DEL SEMINARIO LA TRANSFERENCIA DE LACAN


SEMINARIO LA TRANSFERENCIA DE LACAN


III LA METÁFORA DEL AMOR
El problema del amor con su base que son las posiciones amante/amado, nos va a permitir saber qué ocurre en la transferencia.

Síntesis
Utiliza  la analogía del problema del amor y de la transferencia, para lo que se vale de los dos términos, activo, amante, y pasivo, amado. En esta analogía tanto la cuestión de un saber que no se sabe, el saber inconsciente, como la del estar sujeto a una falta, que es lo que indefectiblemente se encuentra el análisis, entran en juego en la discordancia entre ambos términos, pues eso que le falta a uno no es lo que el otro tiene y  le sirve para plantear la fórmula de la metáfora y por tanto de la significación del amor. El primer discurso es el de Fedro, quien presenta al amor como un dios, realidad del amor que se manifiesta y se revela en lo real, y en el que es interesante señalar la alta calificación en la que se le coloca, planteando la cuestión del sacrificio por amor, con los 3 personajes elegidos, Alcestis, Orfeo y Aquiles. Orfeo queda descartado pues no es capaz de morir por amor; mientras que los otros dos se particularizan y diferencia por sus posiciones, Alcestis, en la posición activa de amante, y Aquiles en la del amado y por esto mismo es más reveladora su elección, vengar a Patroclo, aun sabiendo que morirá.

 
IV LA PSICOLOGÍA DEL RICO

El objetivo es apuntar al objeto de amor, al ser del otro, sabiendo por eso que fallar sería el haberle faltado. En la cuestión del amor el otro no es un sujeto sino el objeto amado. Si nos interesa la metáfora del amor que es la sustitución del amado/amante, es porque siendo amado es nuestro propio amor lo que tenemos delante, y de repente al pasar a ser el amante entonces estamos en el lugar del que desea y como dice Lacan siempre es inexplicable que algo responda al deseo.

viernes, 4 de noviembre de 2011

TRINITARIO

Una madre enamorada de su hijo y despechada por no sentirse correspondida. Todo lo que el hijo hace viene a disgustarla porque porta la marca del rechazo. Además no entiende cómo es que le echa la culpa a ella.

Un padre que reconoce sentirse a gusto en el hogar cuando el hijo no está, y haber querido que el hijo se fuera para poder sentirse a gusto.
Y se culpa por ello, signo entonces de su amor.

Un hijo que dice haber tocado fondo y reconocer la oportunidad que le brindan sus padres, un hijo que admira al padre y que dice que su madre es otra cosa, control y reproche.


            
                MADRE ENAMORADA                 PADRE ANGUSTIADO
                Y DESPECHADA                        Y DECEPCIONADO


                                        HIJO QUE NO SABE
                                        EN QUÉ RECONOCERSE





martes, 18 de octubre de 2011

EN EL HILO...

...DE LA REUNIÓN II DEL 23 NOVIEMBRE 1960 
SEMINARIO 8 de J. Lacan "La transferencia"

Sabemos que Lacan ha escogido para introducirnos en la transferencia, en el amor de transferencia, el diálogo de Platón "El Banquete".
Nos cuenta qué es el banquete, y la irrupción que supone la entrada del personaje Alcibíades, de quien Sócrates se declara como su primer amante, el primero que ha amado a Alcibíades, el cual goza de una gran belleza y de una excepcional inteligencia, logrando así seducir a quien se propone. Podríamos decir que con él llegó el escándalo, para calificar esta historia de Sócrates y Alcibíades en  su magnitud.
Si tomamos la escenificación del banquete con las sucesivas intervenciones, que se van encadenando, como una analogía de las sesiones psicoanalíticas, nuestra pregunta es qué sentido dar al discurso desplegado con la irrupción de Alcibíades, sabiendo de entrada que el tema elegido en el banquete es el del amor. 
Así que Lacan nos prepara para entrar en ese escenario del amor con dos o tres señalamientos sobre el tema: 
-el amor es dar lo que no se tiene, 
-el amante es quien está como sujeto del deseo, 
-el amado está como el que en la pareja, es el que tiene, 
-por lo tanto la cuestión es saber si eso que tiene está en relación con eso que al otro, el amante, le falta, si es posible establecer una relación cualquiera entre lo que a uno le falta y el otro tiene
Y nos avanza una respuesta al recordarnos que el deseo es siempre deseo de otra cosa pero que justamente la conjunción del deseo con su objeto por inadecuado, permite ese giro que hace surgir eso que se llama amor.
Es decir gracias al amor es que vamos a intentar recuperar lo que perdimos para poder existir, para tener unas existencia propia. El deseo nos empuja a la búsqueda del objeto y cuando creemos encontrarlo resulta que no era eso, es decir que no es posible la satisfacción del deseo, pero justamente el amor nos sitúa siempre en la posibilidad, más bien diría en la suposición, de que reencontrarlo es posible.

 

EN EL HILO...

...DE LA INTRODUCCIÓN DEL SEMINARIO 8 DE J. LACAN "LA TRANSFERENCIA"

Plantear el tema de la transferencia implica señalar primero eso que es único, disparatado y equívoco como propio de la transferencia. 
Por eso el título de esta introducción "En el inicio fue el amor", en el inicio de la experiencia analítica es el amor, con lo que tiene de equívoco, incluso en el inicio del psicoanálisis, en su nacimiento, también hubo una historia de amor, el encuentro de un hombre y una mujer ( Breuer y Anna O.).  
Así que Lacan en esta ocasión elige a Sócrates porque aunque éste dice no saber nada, sí sabe un poco sobre el amor, sobre la relación y los lugares del amante y del amado. 
Sócrates como Freud saben mantenerse en su lugar a pesar de los embates del amor que les es dirigido, esto les hace maestros del pequeño dios del amor Eros, gracias a que su posición es la de prestarse a servir al amor para servirse de él. Es la posición del psicoanalista prestarse al amor de transferencia para servirse de ella en la dirección de la cura analítica.
El encuentro analítico no es el encuentro entre dos sujetos, no es una situación de intersubjetividad, en este sentido podríamos decir que es desigual, y además como dice Lacan, dicho encuentro va a enseñarle al analizante "lo que le falta" y esto lo va a aprender
desde una  posición de amando, por esto puede enunciar que el psicoanalista "no está ahí por el bien del analizante sino para que él ame". 


En el inicio... el amor... para vivir necesitamos el amor, sin él no podemos sostener nuestra existencia, por eso partiendo de esta necesidad general el analista hace una propuesta sin condiciones, prestarse al amor de transferencia, por que es gracias a esta necesidad de amor que cualquier persona puede funcionar en la transferencia.

jueves, 13 de octubre de 2011


Sobre la película


El Creyente de Henry Bean


Texto en página 
"El drama del neurótico"

viernes, 7 de octubre de 2011

GRUPO DE ESTUDIO Y LECTURA

Texto para la lectura 
El Seminario VIII "La Transferencia" de J. Lacan

Este es un enlace para encontrar el seminario por si no encuentran el libro:
http://es.scribd.com/doc/7145569/Jacques-Lacan-Seminario-8

Próxima reunión:
Lunes 17 octubre 2011 a las 17h.
Col·legi de Psicòlegs, C/ Ramon i Cajal 11, Tarragona

NADA


          Viniste de la mano de otro 
          Pincelada apenas esbozada 
          Porque el llamado de alguien
          Interrumpió lo que todavía
          Era nada.

                              Fuiste primero palabra
                              En el decir de otro ser,
                              De ella, la que de ti hablaba,
                              La palabra coloreada
                              Apenas nada.

Tú que te fuiste haciendo
Con trazos quebrados
Dejaste mis ojos ciegos
Por la luminosidad
De tu nada.

                              Rojo vino libaste en mi cerebro
                              Dibujando un atajo
                              De la idea cromada, pigmentada
                              Al aroma de un pensamiento
                              Que piensa nada.

Háblame con el silencio
A través de la nada que somos
Y no la llenemos,
Ni siquiera con palabras,
Ni con la voz descarnada
De las imágenes pintadas,
Ni con la mirada imaginada
En la reverberación plateada
De unas lágrimas estancadas.
No la llenemos, no,
Con NADA.
          

lunes, 3 de octubre de 2011

LEER

Soy oyente al comienzo de la mañana. 
A lo largo del dia voy siendo más lector, que otra cosa.
Por eso ahora voy a plantear la cuestión de la lectura.
Oí hoy a un político decir e insistir, parece que ya lo había repetido en diversas ocasiones aunque sin efecto aparente, que es necesario leer todo el texto antes de hablar sobre él o de tomarlo como objeto de comentario.
Leer sólo una o dos frases, que inevitablemente se convierten en titulares, es malentender y malinterpretar al autor. 
Es evidente y sobre todo preocupante cómo el pequeño fragmento de texto es erigido en algo lleno de sentido, con una plena significación, es decir se le otorga un sentido global i universal, deviniendo simultáneamente en una explicación total que guarda la clave vital y existencial del mundo y quienes lo habitan.
Estos fragmentos no sólo llenan los manuales de "ayuda", para ser feliz, para tener éxito, para salir de la tristeza, ahora la llaman depresión, para dejar las adicciones cotidianas y legales, etc., sino que también invaden los medios de comunicación, invaden y obturan el lugar de la información, de la reflexión y del debate. 
Bueno podemos estar tranquilos, nos dan la medicación necesaria para colmarnos y calmar así el interrogarse, el querer saber por sí mismo, el movimiento hacia, el desear, el soñar, el idear, el fantasear, el imaginar y por último el realizarlo. Entre las indicaciones de este medicamento está la de parar el acto, stop entonces a la subjetividad.
Leer es otro acto del sujeto, leer un texto en su composición es un acto subjetivo de reconocimiento del sujeto, en este caso del autor del texto.
Reconozco que leer puede convertirse en una medicina que cura, pues me libera de esa cierta locura que hay en mí, reconozco que uso la lectura como un medicamento pero no como una droga, así que quizá puedo decir que soy adicta a la lectura pero no soy toxicómana. 
Hago pues una importante discriminación, entre el psicofármaco usado como medicamento que cura y el usado como droga, que implica la toxicomanía, hábito patológico de intoxicarse con sustancias que procuran sensaciones agradables o que suprimen el dolor..según el diccionario.
Dicha discriminación implica la exclusión del uso del medicamento como droga, del uso toxicómano de cualquier sustancia legal, lo que implica estar en desacuerdo con la prescripción generalizada, a veces continuada, y siempre protocolaria del DSM.

martes, 27 de septiembre de 2011

¿Cuánto tiempo llevamos desde que nos diagnosticaron esta enfermedad que parece mortífera?
Cada mañana al despertar nos sobreviene la misma condena.
El cáncer económico sigue su invasión y esas células malignas financieras proliferan y se multiplican a sus anchas.
Los politicomédicos nos van diciendo todo lo que creen que se podría hacer, pero parece que tienen dificultades para disponerse y decidir actuar. 
Nos dicen, sí, pero no hay acto. Y en ausencia de un acto ¿qué nos queda sino seguir padeciendo y empeñarnos en sostener eso que ya dejó de ser una economía sostenible? 
Quizá nos queda prepararnos para la propia locura de vivir sin el cáncer, para permitirnos pensar, hablar y decir sin oponer resistencia, ni reticiencias, ni obstáculos, sin censura, sin temor de uno mismo, con la serena aceptación de cualquier descubrimiento. 
Decir y escribir no lo que uno se propone sino lo que viene por sí mismo sin ser esperado.

lunes, 26 de septiembre de 2011

En el camino
Feliz
Con una mirada radiante
Alegre
Con guirnaldas vaporosas
Libre
Con su sueño ondeante

             En el camino
                               Floreciente
            Por miríadas de yemas
                Desbordante  
            Por estrellas fugaces
                           Crepitante            
            Por ardorosa adolescencia
                                   En el camino
                                            Segada
                                              Como cereal espigado
                                                Transformada
                                                 Como crisálida envejecida
                                                    Finalizada
                                                       Como espora resurgida

                                               En el camino
                                               De la vida

martes, 9 de agosto de 2011

"DE NADA"

Suelo empezar el día escuchando la radio. Creo que después de tanto tiempo puedo decir ya, que es un hábito. 
Hace unos días caí en la cuenta de que las personas invitadas a hablar, al ser despedidas por el presentador con un "gracias", ninguna respondía con un "de nada" sino que repetían "gracias". Así que desde entonces he seguido atenta y dicha observación sigue verificándose cada vez.

¿Qué pensar de esta curiosidad? Ya nadie contesta a las "gracias" recibidas con un "de nada".

¿Es que todo el mundo en este país da las gracias en respuesta a "gracias"?
"Gracias por dejarme hablar, gracias por su interés ya que me llama, gracias por ofrecerme un espacio para hablar, gracias por darme las gracias, gracias y gracias".

¿Qué supone el decir "de nada" que ya no se dice? El decir "de nada" supone hacerlo desde una posición, al menos, de autoreconocimiento del valor de la propia palabra, de autovaloración del decir propio, de un decir personal y particular. 

Si se nos da las gracias por haber aceptado hablar, porque no podemos reconocer que al hacerlo aceptamos también la importancia de nuestro decir y aceptamos que aquel que nos lo requiere nos está agradecido. Responder "de nada" es también reconocer al otro en su agradecimiento.

¿Es que no está bien reconocerse dando? ¿Es que las gracias sólo son para el amo? Si al "gracias" que recibimos no podemos contestar "de nada", no será que hacerlo nos coloca imaginariamente en esa posición de amo, con lo que el rechazo de esa posición, que supone el borramiento del decir "de nada", evidencia nuestra posición de alienación al odio contra el otro como amo, y nuestro imaginario de su goce sin límite.

Así que estamos en el padecimiento de la singularización. Singularizarse es decir aceptarse en su singularidad, implica hacerse amo más que de su palabra, de la gramática de sus frases, es decir de las palabras enlazadas en frases,  luego implica hacerse sujeto que dice en nombre propio y se dirige a otro. 

Responder "de nada" al "gracias" que un otro nos dirige, es responder  en nombre propio dando cuenta de nuestra singularidad. 

viernes, 5 de agosto de 2011

LO IMPOSIBLE

La práctica psicoanalítica es una práctica de la palabra, sin embargo la clínica psicoanalítica es una clínica de lo escrito, la clínica misma es escritura, la escritura de lo necesario y contingente para cada sujeto. Esta disyunción es lo propio de la división del sujeto, la imposible relación entre escritura y palabra.

CUERPO Y PALABRA

Si de un espacio infinito el cuerpo desciende pasivo
 ¿Puede sostenerse el ser en la conjugación del verbo?

Si el ser flota informe en la cadencia del sonido
¿Puede coagularse el ánima en el verbo originario?

Volar sin gravedad en la rima de tu verso
Dando solidez al soplo de una vida

Hacerse existir en la sintaxis de las frases
Trasvase de goce al cuerpo de una gramática

jueves, 4 de agosto de 2011

La potencia del deseo

LA POTENCIA DEL DESEO

El deseo se inicia al mismo tiempo que la existencia del sujeto, justamente podríamos decir que el C. de Edipo se cumple porque el deseo le precede. Existir como sujeto implica reprimir aquello que le objetiva.

El hábitat propio del ser humano es el hábitat simbólico. Somos esperados en el lugar donde algo falta, en el lugar faltante del deseo, lugar situado en el Otro, y donde somos extraños a nosotros mismos.
Así que desde un origen somos convocados a identificarnos con el objeto del deseo del Otro, ahora bien esta identificación primera es aniquiladora puesto que identificarse a algo que falta o que no existe es no existir, es hacerse equivalente a nada.

Esta identificación está en el orden del ser, convoca la cuestión del Ser y la Nada, “ser” eso que le falta al Otro y por eso su deseo nos invita a dicha identificación, la cual implica ser nada, y también la cuestión de Hamlet, Ser o No Ser, aceptar ser el objeto de deseo del Otro tiene como consecuencia el objetivarnos, anulados como sujetos, rechazar dicha identificación nos salva como sujeto pero a costa de una pérdida de ser, de un des-ser o de una falta-en-ser.

jueves, 28 de julio de 2011

Una Imagen Sin Palabras

EXISTIR

Hablar del acto inaugural de la existencia del sujeto supone hablar del “dolor de existir”, pues estamos hablando de un advenimiento doloroso y estructural de un sujeto dividido, momento del trauma originario de toda existencia.

El ser humano por el hecho de ser un ser-hablante nace a la existencia como un sujeto dividido, es decir, no es Uno, no hay Unidad del Ser, es un sujeto justamente porque está dividido, lo que implica una separación radical de una parte de sí mismo, de ese sí mismo que uno hubiera podido ser para el Otro, esa parte separada y perdida para siempre y por eso mismo hermanada de por vida, pequeño otro que nos acompaña como un doble inaprensible.

En el origen pues un duelo original, y el nacimiento de un deseo que mueve a buscar reencontrarse con ese yo perdido e ideal, con esa parte de sí mismo gozosa, el deseo es una manera activa de superar ese primer traumatismo.

En realidad porque nuestra existencia subjetiva es una existencia sin causa, sin razón, es que nos resulta angustiante. El dolor de existir es eso que hay de más intolerable, la existencia reducida a ella misma, más allá de lo que puede sostenerla, o sea una existencia sin significación.

miércoles, 27 de julio de 2011

Se acabó el idilio


Se acabó el idilio
De la naciente extranjería
Con la nativa envejecida

Se acabó el idilio
De amarse a sí misma
En los ojos del foráneo

Entrar
En un coma accidentado
En una momentánea inexistencia

Perderse
En un tiempo ilimitado
En una neblinosa indefinición

           

Ser lapsus
En el mundo del otro
Un paréntesis del amor

Enmudecer
Los sonoros apetitos
De rítmica alternancia

Acallar
El murmullo vital
Portador de otro oído

Silenciar
El movimiento agitado
Vecino al deseo

Y despertar luego
Hablando otra lengua
Abandonando las mudas
Hueras de narcisismo
Renacer entonces
En palabra extranjera
Aceptando la hendidura
Del imposible idilio.











PALABRAS PARA UNA IMAGEN